Se desconoce que esta estación haya sido declarada Monumento Nacional, por lo que varios edificios que hacían parte de la estación y que “conforman una unidad arquitectónica representativa de una época del desarrollo del país”, fueron derribados y el espacio fue asignado para lo que actualmente es la plaza de mercado.

No obstante, aunque es un lugar olvidado, su belleza arquitectónica aún puede apreciarse, y los rincones que sirvieron como punto de partida y de llegada de pasajeros, abarrotes y diferentes mercancías provenientes de diversas partes del país, hizo de la estación un lugar estratégico para el funcionamiento del sistema ferroviario y un símbolo de identidad de esta población, ya que la imponencia de su arquitectura demostraba los niveles de desarrollo de sus habitantes.